Ya tenemos nuestra puerta de Halloween.

Así es como luce la entrada a nuestra clase desde ayer. Al final ha quedado un gato negro aunque la primera intención era hacer un lobo. Pensamos que ya era hora de dejar descansar a los papás y mamás y tomar nosotros las riendas.

Soy un maestro que piensa que se puede aprender haciendo todo tipo de cosas, las divertidas también, así que en clase decidimos que este año no nos íbamos a copiar de los ejemplos de internet y que sería mucho mejor crear nuestra puerta original. Hicimos una tormenta de ideas donde salieron varias opciones muy interesantes. Entre todas se hizo una votación y ganó el proyecto de hacer un lobo de miedo con una boca muy gramde en la hoja de la puerta que se abre para que pareciese que el lobo nos come al entrar a clase. Por supuesto me pareció una magnífica idea y les conseguí los materiales. Todo lo que veis lo han hecho ellos, yo solamente he supervisado y ayudado a pegar las partes más altas, y ha quedado una gran puerta. Espero que os guste.