Poniendo la clase a punto.
Hoy hemos aprovechado para poner la clase a punto ya que el lunes empezaremos ya a dar materia de quinto. Hemos terminado varios rincones que utilizarán los peques cuando tengan tiempo después de haber trabajado en clase. Los he dividido en equipos de trabajo y este ha sido el resultado.
Rincón de los cuentos locos.
Consiste en, lanzando un dado, elegir al azar una de las seis posibilidades de cada fila (Protagonista, mascota, espacio temporal...) y hacer una historia intentando unir cada una de las partes de la manera mas coherente posible. Un astronauta puede tener un dragón de mascota y un reloj que para el tiempo en el fondo del mar...) Por cada historia que realicen será leida en clase y les hará avanzar en el juego de clase. Con este rincon pretendemos trabajar la expresión escrita, la ortografía y caligrafía además de fomentar la imaginación.
El segundo rincón que hemos terminado ha sido bautizado como "Circuíto Matemático". Se ha creado una especie de circuito con 5 estaciones. Cada vez que se empiece un tema nuevo de matemáticas se colocará un problema en cada estación por nivel de dificultad.
Los alumnos que terminen sus tareas en clase y elijan este rincón deberán empezar por la estación número 1 (más fácil). Por cada problema que consigan resolver conseguirán un avance en el juego de clase. Si antes de cambiar los problemas alguno es capaz de resolverlos todos como premio tendrán un avance extra. Los problemas matemáticos suelen ser de las cosas más difíciles para los niños de esta etapa por eso es el rincón que con el que más avances puedes conseguir, con él trabajaremos el pensamiento lógici matemático y el cálculo además de repasar los contenidos del tema que estemos dando,
"Toma frutanazo" es el nombre que han elegido para este rincón. A diferencia de los dos anteriores éste no se trabaja en el tiempo que sobra a los niños después de trabajar. Este rincón está pensado para fomentar los hábitos de vida saludable (concretamente el consumo de fruta). El funcionamiento es muy sencillo, cada uno ha confeccionado una ficha que se colocará en la parte baja del juego. Cada día que traigan fruta para el desayuno del recreo subirán un nivel en el juego y cada vez que consigan alcanzar lo más alto conseguiran avanzar en el juego de clase.
Los alumnos restantes se han estado encargando de decorar los libros viajeros que la semana que viene previsiblemente empiecen su periplo y llegarán a los primeros hogares.
Estamos en una etapa de acoplamiento mutuo donde ellos deben entender que todo lo que se hace en clase es trabajo aunque estén jugando y yo entender que estos niños aún no saben gestionar mi forma de trabajar y que debo empezar desde el principio. Antes de que nos demos cuenta parecerá que llevamos toda la vida juntos y todo funcionará como la seda.
